El mundo de la perfumería está lleno de creencias populares que muchas veces pueden confundirnos. Hoy desmentimos algunos de los mitos más comunes y te contamos la verdad sobre los perfumes.
Mito 1: Frotar las muñecas hace que el perfume dure más
FALSO. Frotar las muñecas después de aplicar perfume rompe las moléculas aromáticas y altera su evolución. Lo mejor es aplicarlo y dejar que se seque naturalmente.
Mito 2: Los perfumes caros siempre son mejores
FALSO. El precio de un perfume no siempre determina su calidad. Muchos perfumes de equivalencia tienen ingredientes de alta gama y gran duración.
Mito 3: Guardar el perfume en el baño no afecta su calidad
FALSO. El calor y la humedad pueden alterar la composición del perfume. Lo ideal es guardarlo en un lugar fresco y oscuro, lejos de la luz solar y los cambios bruscos de temperatura.
Mito 4: Si no hueles tu perfume, significa que se está en mal estado
FALSO. Nuestro olfato se acostumbra a los aromas que usamos con frecuencia, lo que puede hacer que dejemos de percibirlos, pero los demás sí lo notan.
Mito 5: Aplicar más cantidad hace que el perfume dure más
FALSO. La clave no está en la cantidad, sino en dónde lo aplicas. Usa zonas de pulso (muñecas, cuello, detras de las orejas) y una piel bien hidratada para maximizar su duración.